Una fotografía tomada el 19 de enero de 2021 muestra al maestro suizo Francois Junod posando con las herramientas y cabezas utilizadas para la elaboración de las obras de arte mecánicas en su taller en Sainte-Croix, Suiza.
En las montañas del Jura, a lo largo de la frontera franco-suiza, se han transmitido de generación en generación las habilidades detrás de algunos de los mejores relojes y autómatas del planeta.
En su taller cubierto de nieve, las obras de arte mecánicas en movimiento del maestro suizo Francois Junod entran en acción: los pájaros silban, las luminarias históricas escriben poesía... Se trata de una artesanía tradicional reconocida recientemente como patrimonio cultural de humanidad.

Las obras de arte mecánicas en movimiento del maestro suizo Francois Junod entran en acción: los pájaros silban, las luminarias históricas escriben poesía... Se trata de una artesanía tradicional reconocida recientemente como patrimonio cultural de humanidad.
En diciembre de 2020, la artesanía de la relojería mecánica y la mecánica artística del Jura se inscribieron conjuntamente en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la UNESCO.
Ahora se sientan a la par con el tango argentino, la cultura cervecera belga, la caligrafía china, la cocina francesa, el yoga indio, el teatro Kabuki japonés, el Día de Muertos de México y el flamenco español.