Privacidad y Cookies

Al continuar navegando en esta web acepta el uso de cookies, la política de privacidad revisada y los términos de uso. Puede cambiar la configuración de las cookies en su navegador.

Estoy de acuerdo
Si los tesoros nacionales pudiesen hablar: Dragón de cobre bañado en oro con estructura de hierro
CGTN en Español
Error loading player: No playable sources found

05:01

‍Este es un dragón de la dinastía Tang. Su cuerpo está hecho de cobre y su estructura interna es de hierro. Toda la figura está bañada en oro.

La postura tiene forma de "S", con la cabeza erguida. Largos cuernos con tres nudos se extienden hacia atrás, pegados a la parte superior de la cabeza. Su gran boca está abierta, mostrando afilados dientes. La larga lengua se enrolla dentro de la boca, con su punta tocando la mandíbula superior. Sus ojos son grandes y brillantes.

Sus patas delanteras están rectas y sus garras están dobladas para sostenerse firmemente en el suelo. El detalle de sus nudilos permite ver la belleza que se esconde detrás de la fuerza.

La parte inferior del abdomen, las patas traseras y la cola flotan en el aire con dos nubes auspiciosas en su espalda, como si estuviera descendiendo del cielo.

‍Este es un dragón de la dinastía Tang. Su cuerpo está hecho de cobre y su estructura interna es de hierro. Toda la figura está bañada en oro.

El bañado en oro era una de las técnicas más sofisticadas de la antigua China. Es reconocido por su finura y su perfecta fijación al objeto, ocultando de forma impecable el material original. Al final, una pieza bañada en oro de esa época puede pasar fácilmente por una obra hecha en su totalidad de ese metal precioso. Sin embargo, este dragón volador no es una imagen común, ni siquiera en las obras bañadas en oro de la dinastía Tang.

La estructura es de hierro fundido y está recubierta de cobre. Y encima de todo esto va el baño de oro. Esta técnica le da a la pieza una apariencia de lujo, y al mismo tiempo la hace muy resistente, lo que le permitió al artesano dar rienda suelta a su creatividad.

En la dinastía Tang, el dragón era considerado un animal auspicioso. En sus observaciones astronómicas los chinos de la antigüedad, se dieron cuenta de que en el Este las estrellas Jiao, Kang, Di, Fang, Xin, Wei y Ji estaban conectadas y formaban la imagen de un dragón. Por lo tanto, las llamaron las "estrellas dragón", como una forma de expresar su adoración hacia este animal sagrado.

La gente de la dinastía Tang creía que el dragón podía llevar sus deseos al cielo. Por ello, le rendían homenaje para lograr bendiciones a través de él.