Fuente: AFP
Varias ciudades del mundo apagaron sus luces durante una hora el pasado sábado 27 de marzo con motivo de la Hora del Planeta, que este año pone de relieve la relación entre la destrucción de la naturaleza y los crecientes brotes de enfermedades como el COVID-19.
La iniciativa, que pide tomar acciones frente al cambio climático, dio la vuelta a un mundo azotado por la pandemia. En América Latina, fueron apagadas las bombillas del Obelisco de Buenos Aires y las del Museo del Mañana en Río de Janeiro. También quedó a oscuras la torre BBVA de Ciudad de México, uno de los edificios más altos de la urbe. En Colombia, un llamado general del Ministerio del Ambiente a apagar las luces tuvo poca acogida, aunque sí se desactivaron los alumbrados públicos en algunas ciudades y también la tradicional iluminación de la Torre Colpatria de Bogotá.

La iniciativa, que pide tomar acciones frente al cambio climático, dio la vuelta a un mundo azotado por la pandemia.