Los recientes enfrentamientos y protestas en Irlanda del Norte han aumentado las preocupaciones en Dublín y Londres. La semana pasada se registró en Reino Unido la peor ola de violencia en años. Mientras prosiguen los disturbios, grupos de lealistas han exhortado a mantener la calma, pero la indignación que ha generado la gestión de la pandemia de COVID-19 y las barreras comerciales posbrexit solo han hecho que acrecentar el enfado de la ciudadanía.

Los recientes enfrentamientos y protestas en Irlanda del Norte han aumentado las preocupaciones en Dublín y Londres.