El Ministro de Relaciones Exteriores de Australia anunció el 21 de abril que rompería el memorando y el acuerdo marco de la Franja y la Ruta firmado entre China y el Gobierno de Victoria de Australia con el argumento de que "no se ajusta a la política exterior de Australia o no es propicio para nuestras relaciones diplomáticas". Se trata de que algunos políticos australianos están tratando de dejar perpleja a China y halagando a su "hermano mayor" de Estados Unidos para ganar capital político.
Pensando en que el Congreso de los EE. UU. está impulsando la Ley de competencia estratégica de 2021 y exigiendo que la Administración de Biden adopte una política integral de "competencia estratégica" con China, la mala manipulación política de Australia no es inesperada. A finales del año pasado, el Parlamento australiano aprobó una nueva Ley de Relaciones Exteriores, que otorga al gobierno federal el poder de vetar cualquier acuerdo alcanzado entre estados y países extranjeros, dirigido al acuerdo la Franja y la Ruta firmado entre Victoria y China. Hoy, el Gobierno australiano ha utilizado por primera vez el veto otorgado por este proyecto de ley, y el acuerdo la Franja y la Ruta es su objetivo.
En vista del estatus internacional de Australia, la medida del Gobierno australiano tiene poco impacto en la construcción de la Franja y la Ruta. Por el contrario, permite que el mundo vea aún más el vicioso carácter de los políticos australianos representados por Morrison.
En los últimos años, los políticos australianos han seguido la prohibición por parte de Estados Unidos referente a la participación de Huawei en la construcción de la red 5G, la llamada "investigación independiente" del origen del nuevo coronavirus y los disparates sobre temas relacionados con Hong Kong y Xinjiang, mientras presenta una postura de querer cooperar con China. Recientemente, el ministro de Comercio de Australia dijo a su contraparte de China que "siempre hay una manera de iniciar un diálogo difícil entre buenos amigos". ¿Australia está hablando así con "buenos amigos" rompiendo el acuerdo? Obviamente, no demuestran sinceridad a la hora de mejorar las relaciones con China y solo tienen cálculos políticos en sus corazones.

El primer ministro australiano, Scott Morrison.
Sin embargo, el Gobierno australiano ha sobreestimado su propio valor. Aunque han demostrado su lealtad a Estados Unidos rompiendo el acuerdo con China, ¿obtendrán los beneficios que quieren? Como comentó el exdiplomático australiano, Tony Kevin, la política de Morrison para con China hará que Australia pierda un mercado que era estable, y los exportadores de Estados Unidos y Europa aprovecharán la oportunidad para cubrir la vacante.
De hecho, la operación política del Gobierno australiano en el tema de la Franja y la Ruta está dañando sus propios intereses, especialmente el bienestar del pueblo australiano. La Franja y la Ruta es una iniciativa de cooperación económica que aporta beneficios tangibles a los participantes. El primer ministro de Victoria, Andrew, dijo en mayo del año pasado que las exportaciones de Victoria a China han aumentado en un 62 por ciento en los últimos cinco años, y el número de turistas chinos que visitan Victoria ha aumentado en un 70 por ciento.
Durante más de siete años, el cuestionamiento y la difamación de la iniciativa la Franja y la Ruta nunca ha impedido la expansión del círculo de amigos de la Franja y la Ruta, y nunca ha afectado el entusiasmo de la mayoría de los países por participar en esta iniciativa. Hasta noviembre de 2020, China ha firmado 201 documentos de cooperación para la construcción conjunta de la Franja y la Ruta con 138 países y 31 organizaciones internacionales. La manipulación política de algunos políticos australianos no puede afectar el vigoroso avance de la construcción de la Franja y la Ruta. Solo dañará la imagen y la credibilidad nacionales de Australia y se convertirá en el hazmerreír en el área política internacional.