Fuente: AFP
El Gobierno de Venezuela dispuso el pasado fin de semana centros de inmunización masiva contra el coronavirus en distintos puntos del país, en medio de denuncias de retrasos en el plan iniciado el febrero pasado y una virulenta segunda ola de la pandemia.
Uno de ellos se instaló en la cancha de baloncesto de la emblemática barriada caraqueña el 23 de enero donde, según los organizadores, se prevé aplicar unas 1.000 dosis por día.
Los mayores de 60 años reciben la vacuna rusa Sputnik V; los menores, la china Vero Cell, producida por el laboratorio Sinopharm.
Las citas se agendan a través del "Sistema Patria", una base de datos lanzada en 2017 por el gobierno chavista que la oposición ha denunciado como un mecanismo de control social.
Desde que comenzó el plan de vacunación masiva, miles de personas han decidido probar suerte y acudir a los centros sin haber sido convocados, con la esperanza de recibir una de las vacunas.
El gobierno fijó como meta la inmunización del 70 % de la población para diciembre.
La vicepresidenta ejecutiva de Venezuela, Delcy Rodríguez, aseguró la semana pasada que el 11 % de los venezolanos ya habían sido vacunados, una cifra que fue puesta en duda por la ONG Médicos Unidos, crítica con el gobierno chavista.

Los menores reciben la vacuna china Vero Cell, producida por el laboratorio Sinopharm.