Privacidad y Cookies

Al continuar navegando en esta web acepta el uso de cookies, la política de privacidad revisada y los términos de uso. Puede cambiar la configuración de las cookies en su navegador.

Estoy de acuerdo
Expertos y lectores se pronuncian contra reportes infundados de medios de EE. UU. sobre hipótesis de fuga de laboratorio
XINHUA

Frente a los reportes carentes de evidencia difundidos por algunos medios estadounidenses sobre la hipótesis de fuga de un laboratorio de Wuhan, muchos expertos y lectores se han pronunciado al respecto y han indicado que la cobertura de prensa sólo ha creado una desviación de los problemas reales en Estados Unidos y ha restado credibilidad a los medios de comunicación.

En un artículo publicado el 23 de junio en The Conversation, un medio en línea que difunde reportes periodísticos y artículos escritos por académicos e investigadores, Keith Grehan y Natalie Kingston de la Universidad de Leeds dijeron: "Mientras que un origen natural parece probable, y muchos han advertido desde hace tiempo acerca del peligro de los virus que circulan en la vida silvestre, los científicos no deben precipitarse a sacar conclusiones".

Al referirse a un reporte del periódico The Wall Street Journal (WSJ) sobre la hipótesis, los investigadores añadieron que "el origen del Sars-CoV-2 podría permanecer sin resolverse, pero en el reporte del WSJ no se presenta ninguna evidencia que apoye científicamente el concepto de una fuga de laboratorio de un virus diseñado genéticamente".

FAIR, un grupo observador de medios de comunicación de Estados Unidos, el lunes criticó la información infundada. Es obviamente cierto que personas como el ex presidente de Estados Unidos Donald Trump y el ex secretario de Estado estadounidense Mike Pompeo "son notorios por ser mentirosos descarados, y promovieron descaradamente la teoría de la fuga de laboratorio en un cínico intento por convertir a China en un chivo expiatorio por el desastroso manejo de la pandemia en Estados Unidos", señaló.

"Además de basarse en funcionarios no identificados", añadió FAIR, "otro problema del reporte del Journal es que su autor principal, Michael R. Gordon, fue coautor (junto con Judith Miller) del notorio artículo publicado por The New York Times... que fue quizás el mayor ejemplo de periodismo responsable de engañar a la nación acerca de las imaginarias armas de destrucción masiva de Saddam Hussein".

El profesor Jeffrey D. Sachs de la Universidad de Columbia publicó un comentario publicado en el Project Syndicate el 22 de junio, en el que menciona que el Instituto Nacional de Salud (NHI, siglas en inglés) estadounidense no ha revelado la verdadera investigación que ha financiado y apoyado.

"Es un hecho de conocimiento común entre la comunidad científica estadounidense que el NIH de hecho ha apoyado la investigación recombinante genética sobre virus como el SARS, que muchos científicos describen como GOFROC", indicó el profesor.

Aunado a esto, el mal desempeño de los medios y los políticos también ha decepcionado a los lectores. En una carta publicada el martes en el periódico San Francisco Chronicle, un lector dijo: "En términos generales, el tratamiento de los orígenes de la COVID-19 por parte de políticos y polemistas ha ignorado o distorsionado la ciencia hasta el punto de avergonzar a una nación avanzada".

"Demandemos a nuestros políticos que cesen los ataques contra China y que negocien un marco para un mundo pacífico y próspero", dijo el lector.

Frente a los reportes carentes de evidencia difundidos por algunos medios estadounidenses sobre la hipótesis de fuga de un laboratorio de Wuhan, muchos expertos y lectores se han pronunciado al respecto y han indicado que la cobertura de prensa sólo ha creado una desviación de los problemas reales en Estados Unidos y ha restado credibilidad a los medios de comunicación.