Chanel Nº 5, el icónico perfume francés, celebra este año el centenario de su creación. Creado por Coco Chanel en 1921, la fragancia se popularizó gracias a la actriz Marilyn Monroe, que confesó que se aplicaba unas gotas del preciado perfume antes de dormir.
Pero, ¿qué hace que este perfume sea todavía apreciado y admirado por tantos? Nos desplazamos hasta el sur de Francia para conocer el secreto de su éxito.
Ataviados con peculiares sombreros para protegerse del sol del Mediterráneo, decenas de recolectores de jazmín recogen con mimo las preciadas flores.
El jazmín que crece sobre todo en la ciudad de Grasse tiene un aroma específico y es el ingrediente "mágico" del conocido perfume Chanel Nº 5.
Grasse ha sido una ciudad importante para las flores y las fragancias desde el siglo XVII, cuando los curtidores de cuero comenzaron a perfumar sus piezas. Algunos productores locales empezaron a vender sus tierras en aquella época, en una región que es vecina de populares resorts de la Riviera Francesa, como el popular Cannes.
De este modo, la diseñadora Coco Chanel llegó a un acuerdo con la familia Mul a finales de los 80, convirtiendo a la región en el punto clave de la producción de cinco tipos de flores.
Cuando la pandemia de COVID-19 estalló, los trabajadores de la industria tuvieron mucho cuidado de no contraer la enfermedad, que incluye síntomas como la pérdida del olfato, lo cual es una auténtica pérdida para los maestros perfumistas, conocidos como "la nariz" de este suculento negocio.
Para asegurarse su suministro de jazmín, Chanel ha comprado otras 10 hectáreas extra de terreno, además de las 20 hectáreas que ya posee en asociación con la familia Mul.

Ataviados con peculiares sombreros para protegerse del sol del Mediterráneo, decenas de recolectores de jazmín recogen con mimo las preciadas flores.