La selección de fútbol de Venezuela cayó la noche de este jueves día 7 de octubre 3 goles por 1 ante la pentacampeona selección brasileña, en un partido disputado en el estado Olímpico de la Universidad Central de Venezuela correspondiente a las eliminatorias Conmebol para el Mundial Qatar 2022.
Los locales iniciaron el encuentro con un orden táctico que no habían mostrado en ninguno de los partidos previos. Pese a que enfrentaban a la cinco veces campeona del mundo, los venezolanos plantearon un juego con vocación ofensiva.
En el primer tiempo, la alta presión defensiva de los venezolanos ahogaba permanentemente la iniciativa brasileña y generaba transiciones en ataques que hacían lucir muy bien a los jugadores venezolanos.
En el mismo primer tiempo, el mejor jugador del día por Venezuela, Yeferson Soteldo, mandó un centro preciso al área que el espigado delantero Eric Ramírez cabeceó de forma magistral para sorprender a Brasil con el 1-0 en los primeros 15 minutos de partido.
En adelante, Venezuela incrementó su ataque y preservó muy bien sus esfuerzos en defensa, tuvo claro dominio del balón y generó jugadas de alta creatividad. Brasil tuvo dos claras ocasiones que no pudo materializar.
Ya en la segunda mitad del partido, Venezuela mantuvo su orden pero Brasil se apuró en los ataques. La ofensiva brasilera produjo, entre otras cosas, desgaste de los jugadores venezolanos. Varios salieron lesionados o fueron sustituidos por aparente cansancio.
Fue entonces cuando la eficiente maquinaria ofensiva de Brasil, después del minuto 70, castigó a los locales con sendos goles. El primero, un contundente cabezazo de Marquinhos después de un descuido de la defensa local al minuto 71.
Al 85, una polémica jugada dentro del área devino en un tiro penal que el famoso "Gabigol" se encargó de convertir en el 2-1.
El último gol de Brasil se dio tras una desconcentración de la defensa venezolana en tiempo de descuento, que el debutante brasileño Anthony supo aprovechar para el 3-1.

En el primer tiempo, la alta presión defensiva de los venezolanos ahogaba permanentemente la iniciativa brasileña y generaba transiciones en ataques que hacían lucir muy bien a los jugadores venezolanos.