El viaje de una manada de elefantes asiáticos por la provincia de Yunnan llamó la atención del mundo. Con motivo de la inauguración de la Conferencia de las Partes Signatarias del Convenio sobre Diversidad Biológica de Naciones Unidas, hemos conversado con expertos para saber cómo debemos aumentar la protección de estos animales.
Cuando una manada de elefantes errantes cruzó este puente en agosto, la gente respiró tranquila. Los expertos lo describieron como una "victoria decisiva", dado que estos animales gigantes volvieron a un ambiente adecuado tras su larga travesía. La manada, formada por 14 elefantes, se encuentra ahora en Pu'er y dispone de alimentos suficientes.
Los elefantes viajaron al norte, hasta las afueras de la capital de Yunnan, Kunming. Durante su épica aventura, recorrieron calles urbanas, se adentraron en campos e, incluso, metieron sus narices en hogares de aldeanos, obligando al Gobierno a actuar.
Chen Mingyong formó parte de la misión especial liderada por el Gobierno que acompañó a la manada a lo largo de su trayecto. Aseguró que guiarles hasta su hogar fue un reto sin parangón.
El equipo tomó una serie de medidas experimentales, desde el control de la manada en todo momento mediante drones hasta alimentarlos con diversos tipos de comida.
Ambos expertos aseguran que la manada abandonó su hábitat original en busca de comida, debido a que el bosque les ofrecía menos alimentos de los que necesitaban. Pero terminaron extraviándose. Consideran que, a largo plazo, la mejor solución es la restauración y expansión del hábitat.
El profesor Chen asegura que el establecimiento de un parque nacional debe equilibrarse con el desarrollo de las comunidades locales, para promover la armonía entre los elefantes y los seres humanos.

Los elefantes viajaron al norte, hasta las afueras de la capital de Yunnan, Kunming.