En la final de la pistola de aire comprimido de los 11º Juegos Nacionales Paralímpicos, Zhao Xiaole, de 18 años, ganó el oro tanto en la competencia individual como en la de grupo. El camino hacia su gloria ciertamente no fue fácil y el nativo de Shaanxi ha superado muchos obstáculos para lograr su éxito.
Zhao nació en una aldea remota en la provincia de Shaanxi. Cuando tenía solo un año, su pierna derecha quedó incapacitada por osteomielitis, una enfermedad ósea inflamatoria generalmente dolorosa. Ya más adulto, Zhao conoció en línea a Xia Jiangbo, un excampeón de los Juegos Paralímpicos, y esto cambió por completo su vida.
Xia consiguió que el joven de Shaanxi participara en las pruebas de tiro paralímpico de su ciudad. Zhao logró pasar la prueba y unirse al equipo donde le exigían entrenar desde las ocho de la mañana hasta las 5:30 de la tarde, además de una hora de entrenamiento físico por la noche. El arduo entrenamiento dejó al adolescente con una distensión muscular lumbar, pero éste nunca se rindió. Después de dos años de arduo trabajo, Zhao estuvo a la altura de las expectativas al ganar dos oros en los Juegos Nacionales Paralímpicos.