La jefa ejecutiva de la Región Administrativa Especial de Hong Kong, Carrie Lam, admitió el martes 15 de febrero que la ciudad está desbordada por la última ola de infecciones de COVID-19. Lam afirmó que la respuesta del gobierno no ha sido, y citamos, "satisfactoria". No obstante, en rueda de prensa, la jefa ejecutiva de la región descartó la posibilidad de confinar la ciudad, e informó de que el gobierno está distribuyendo test rápidos a los grupos de alto riesgo. Además algunas residencias públicas se habilitarán como centros de aislamiento. Por su parte, el Gobierno central de China ha anunciado que suministrará más de 100 millones de kits de prueba a la RAE de Hong Kong.

Se realizan tests de COVID-19 en Hong Kong.