La inflación ha obligado a Venezuela a devaluar repetidamente su moneda en los últimos años. Pero algunos artistas del país han encontrado una solución creativa a la crisis. Estos artistas venezolanos están convirtiendo sus obras en tokens no fungibles, también conocidos como NFT. Esto ayuda no sólo a superar la inflación, sino a llegar a nuevos públicos.
El artista venezolano en el vídeo pinta bajo el seudónimo de Amarillo. Durante los últimos 17 años, ha creado arte abstracto y ha presentado sus obras en galerías de arte tradicionales.
Ahora utiliza la tecnología para llevar su arte al siguiente nivel. Ofrece sus creaciones en forma de tokens no fungibles, comúnmente conocidos como NFT. Transforma sus cuadros en archivos digitales que pueden intercambiarse por criptomonedas.
Algunas piezas se venden a un precio fijo y otras se subastan al mejor postor. Cada pieza viene con un certificado digital como garantía de autenticidad y propiedad.
Uno de los artistas plásticos más populares de Venezuela puso recientemente a la venta su primera colección de NFT en el mercado de Binance, una plataforma de intercambio de criptomonedas. Óscar Olivares afirma que este nuevo enfoque está beneficiando a artistas conocidos y desconocidos.
Hace dos años, Eva Cortez comenzó a ofrecer sus dibujos en el mercado NFT. Y ahora está implicada en ayudar al crecimiento del movimiento NFT en Venezuela. Está vendiendo sus dibujos utilizando la tecnología de cadena de bloques y ha escrito una guía paso a paso para los artistas sobre cómo comerciar con objetos de colección NFT.
Muchos artistas venezolanos están haciendo la transición al mundo de los NFT, creando una mayor comunidad de seguidores y demostrando que es posible unir arte y tecnología para ganarse la vida incluso en tiempos de crisis económica.