Se estima que China genera más de 20 millones de toneladas de residuos textiles al año. Los expertos en esta industria aseguran que esta cifra es una combinación de producción y post-producción, sobre todo de ropas que ya han sido utilizadas. Reciclarlas se ha convertido en una popular tendencia en los últimos años. Mientras algunas comunidades chinas cuentan con contenedores específicos de reciclaje de ropa, cada vez son más lo que descubren la conveniencia de los servicios de recogida online. 

Algunas comunidades chinas cuentan con contenedores específicos de reciclaje de ropa.

La empresa que gestiona la plataforma de reciclaje asegura que pueden llegar a recibir hasta 4.000 peticiones de recogida al día.

Lo que supone una media de unas 10 toneladas de ropa al día. Tras la recogida, la ropa usada se somete a un proceso de selección.

Las prendas que están relativamente nuevas o apenas usadas, se donan a las zonas atrasadas. Se lavan y se desinfectan bien antes de empaquetarlas. La empresa asegura que cerca del 70 por ciento de sus pedidos se organiza por categorías.

Los datos sugieren que menos del 10 por ciento del exceso textil de China se recicla o se vuelve a usar. 

La mayoría acaba en vertederos que aumentan la contaminación por emisiones de carbono y plástico. 

Algunas marcas de moda ofrecen descuentos a los clientes que utilizan sus servicios para reciclar la ropa usada. Los expertos aseguran que los desechos textiles no tienen una solución fácil hasta el momento, pero dicen que por lo menos cada vez hay más personas que comienzan a reciclar su ropa.