La entrada en vigor del Impuesto a las Grandes Transacciones Financieras en Venezuela ha sido una medida adecuada para incentivar el uso del Bolívar, debido a que el ciudadano común busca evitar la exposición al impuesto con el pago mediante uso de moneda local. Este nuevo tributo, que entró en vigor el 28 de marzo, no solo afectará a las grandes transacciones financieras, sino a todas las operaciones en dólares y otras divisas extranjeras, así como con criptomonedas. Sin importar el monto, el impuesto se aplicará a todos los movimientos.
"No se aceptan dólares", una frase que hasta hace poco era imposible de imaginar en un país bloqueado como Venezuela, ahora se hace cada vez más frecuente en algunos negocios de la capital. Las razones esgrimidas por los comerciantes son diversas, pero coinciden en que es más fácil negociar con la moneda nacional.
Todo esto, es parte de una estrategia del gobierno venezolano para revalorizar al Bolívar y fomentar su uso por encima del dólar, cuyas transacciones ahora tienen un impuesto al 3%, con lo cual quienes compren en dólares tendrán que pagar el recientemente aprobado Impuesto a las Grandes Transacciones, según indican expertos en la materia.
"Ese es el objetivo del gobierno, comenzar a recuperar en esta etapa el espacio del Bolívar, entonces en este sentido lo que se busca es desincentivar el uso de Dólar, para que el Bolívar, que ha estado desde mediados del año pasado, desde septiembre o agosto del año pasado, ahora se esté recuperando algo del espacio transaccional, en los medios de pago se ha podido avanzar mucho, el número e transacciones es mayor en Bolívares", opinó el economista Ramiro Molina.
A esta realidad, se suman distintos elementos, puesto que la inflación del mes de marzo se ubicó en 1,4%, la más baja en 10 años, panorama que confirma el éxito de la estrategia de gobierno venezolano para burlar las sanciones y salir adelante.

Las razones esgrimidas por los comerciantes son diversas, pero coinciden en que es más fácil negociar con la moneda nacional.