Delegados extranjeros a un Encuentro Internacional de Solidaridad con Cuba recorrieron el 1 de mayo varios barrios de La Habana, donde pudieron entrar en contacto con la realidad cubana y conocer los impactos del bloqueo impuesto a la isla por Estados Unidos desde hace más de medio siglo.

Casi un millar de delegados extranjeros se repartieron por cinco puntos de la capital cubana para intercambiar con la población y comprobar los esfuerzos gubernamentales por transformar algunos barrios preteridos y mejorar la calidad de vida de la ciudadanía.

En el pueblo de Regla, una localidad ubicada sobre el borde este de la bahía habanera, medio centenar de activistas recorrieron esa municipalidad, donde viven unas 43.000 personas.

En el recorrido pudieron conocer de los efectos del bloqueo sobre la industria alimenticia y la pesca, así como de las afectaciones que sufren los inmuebles como consecuencia de la hostilidad de Estados Unidos.

También visitaron varios puntos del poblado construidos o reconstruidos como parte de la voluntad gubernamental de solucionar los problemas de la comunidad, a partir de las prioridades expresas de los propios pobladores.

"Aquí hay una esperanza de un pueblo por recuperar su casco histórico, su pasado", afirmó William Golindano, secretario general del Sindicato Petrolero de la Franja del Orinoco.

El líder sindical venezolano destacó el impacto del bloqueo sobre la vida cotidiana de los cubanos, que, dijo, sufren la política inhumana del Gobierno norteamericano que quiere ver a un pueblo sumiso y arrodillado ante una fuerza imperial.

Los participantes en el Encuentro Internacional de Solidaridad con Cuba, que se inició este sábado y concluirá el lunes, asistirán mañana domingo al desfile por el Día Internacional de los Trabajadores, que tendrá lugar en la Plaza de la Revolución, en La Habana.

Organizado por la Central de Trabajadores de Cuba y el Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos, el encuentro se realiza desde 1994.

Los calles de La Habana, capital de Cuba.