El famoso Candelabro de Paracas, un geoglifo de unos 2.500 años en un cerró frente al mar en el sur de Perú fue dañado.

Según las autoridades dos adultos y un niño caminaron este fin de semana sobre esta figura de unos 170 metros de largo por 60 metros de ancho y 1,20 metros de profundidad.

Las autoridades acudieron al lugar y comprobaron que hubo una "afectación directa" a la milenaria imagen en la arena.

Perú declaró al Candelabro como Patrimonio Cultural de la Nación en 2016. 

La ley peruana castiga con penas de entre tres y seis años de cárcel a quienes dañen, excaven o remuevan monumentos arqueológicos.

Los funcionarios encontraron "dos senderos de pisadas, que van desde la parte baja hacia la cima, en forma zigzagueante.

Sus grandes dimensiones y su diseño sobre la arena hacen suponer que tiene relación con las mundialmente famosas Líneas de Nazca, situadas unos 200 km al sur del Candelabro en medio del desierto, en la misma región de Ica.

Según las autoridades dos adultos y un niño caminaron este fin de semana sobre esta figura de unos 170 metros de largo por 60 metros de ancho y 1,20 metros de profundidad.