El Tribunal Supremo de Sri Lanka ha dictado una orden que prohibe al primer ministro, Mahinda Rajapaksa, abandonar el país sin el consentimiento oficial, y la cual estará en vigor hasta el 28 de julio. Mientras, el presidente recién designado, Ranil Wickremesinghe, asegura que reanudará un Estado regido por la ley y el orden.
Wickremesinghe, presidente en funciones, asumió el cargo tras la renuncia de Gotabaya Rajapaksa, quien renunció el pasado jueves tras varios meses de protestas y crisis económica. En uno de sus primeros actos, Wickremesinghe pidió a legisladores trabajar para alcanzar un consenso orientado al establecimiento de un gobierno multipartidista para el país, que ha sido asolado por crisis consecutivas.
Funcionarios afirman que el proceso para elegir a un nuevo líder, que estará en manos del poder legislativo, comenzará el sábado y conducirá a la elección de un nuevo presidente el 20 de julio.