El día 2 de agosto, el portavoz del Comité Permanente de la APN de China pronunció un discurso sobre la visita de Nancy Pelosi, presidenta de la Cámara de Representantes de EE. UU., a la región china de Taiwan.

Aquí está el texo íntegro.

El día 2 de agosto, Nancy Pelosi, presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, decidió visitar la región china de Taiwan, ignorando la gestión solemne y la oposición firme por parte de China. El hecho ha violado el principio de una sola China y los tres comunicados conjuntos, afectando gravemente la base política de las relaciones entre China y Estados Unidos, ha perjudicado la soberanía e integridad territorial de China, enviando una señal errónea a las fuerzas separatistas de la región Taiwan. El Comité Permanente de la APN se opone resueltamente y lo condena vehementemente.

Hay una sola China y la región de Taiwan es una parte inseparable del territorio chino. El gobierno de la República Popular China es el único representante legítimo del país. El principio de una sola China es la premisa del establecimiento de relaciones diplomáticas y la base política entre China y Estados Unidos. EE. UU. ha hecho una promesa solemne a China sobre la cuestión de la región de Taiwan, mientras ha venido intensificando las relaciones esenciales y oficiales, apoyando a las fuerzas separatistas de la región de Taiwan y tratando de contener a China con la cuestión de la región. El Gobierno y el pueblo chino han tomado y tomarán medidas firmes y fuertes para salvaguardar con determinación la soberanía, la seguridad y el interés de desarrollo del país.

La cuestión de la región china de Taiwan afecta a la soberanía y la integridad territorial. No hay ningún espacio de negociación y concesión. La Ley antisecesión ha estipulado explícitamente la cuestión de insistir en el principio de una sola China, contener a las fuerzas separatistas de la “independencia de la región de Taiwan”, y oponerse a la injerencia exterior en los asuntos de la región. El Gobierno y el pueblo chino nunca ha cambiado su posición. Salvaguardar determinadamente la soberanía nacional y la integridad territorial de China ha sido la voluntad firme de 1.400 millones de chinos. Todo intento de impedir la unificación completa y la gran revitalización nacional de China está condenado al fracaso.