Las autoridades cubanas intentan sofocar un grave incendio ocurrido en una base de supertanqueros de la ciudad de Matanzas, capital provincial de la provincia del mismo nombre, ubicada unos 90 kilómetros al este de La Habana. Una gruesa columna de humo negro, de más de un kilómetro de altura, se eleva desde el lugar del accidente, que se estima fue provocado cuando una descarga eléctrica impactó contra un tanque de almacenamiento de petróleo crudo con más de 26 millones de litros en su interior en la tarde del viernes, 5 de agosto. La base continúa ardiendo a pesar de los esfuerzos de varias brigadas de bomberos, 17 de los cuales se encuentran desaparecidos. Un segundo tanque, de los ocho con que cuenta la base, explotó durante la madrugada y la mañana de este sábado, causando heridas a más de 120 personas. Varios gobiernos ya han ofrecido ayuda técnica a Cuba para tratar de controlar la situación en el menor tiempo posible.

Una gruesa columna de humo negro, de más de un kilómetro de altura, se eleva desde el lugar del accidente.