Tsai Ing-wen, la líder de la región china de Taiwan, extendió la alfombra roja a la presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, a sabiendas de que tal acción socava las relaciones de la región con la parte continental de China y la estabilidad en Asia Oriental. ¿Por qué lo ha hecho? ¿Qué hay detrás de su agresiva búsqueda de la llamada "independencia de Taiwan"? Este artículo ofrece las respuestas.
En realidad, desde que llegó al poder, Tsai ha perseguido la supuesta "independencia de Taiwan". Pero por sí sola, es débil. Así que buscó la ayuda de Estados Unidos para lograr su objetivo. Desde 2016, ella había gastado cerca de 20 mil millones de dólares en la compra de armas estadounidenses en más de dos docenas de acuerdos. Políticamente, se arrimó a gente como el exsecretario de Estado estadounidense Mike Pompeo y posicionó a Taiwan como parte de la supuesta "alianza de democracias" del presidente estadounidense Joe Biden. Desde el punto de vista económico, se lanzó la llamada "Iniciativa Estados Unidos-Taiwan sobre el Comercio del Siglo XXI".
Luego, llegó Nancy Pelosi.
Se considera que el viaje de Pelosi a Taiwan tiene que ver con la construcción de su legado. No es diferente para Tsai. Dentro de tres meses, Taiwan celebrará sus elecciones locales, que serán el barómetro de las elecciones por el liderazgo dentro de dos años. Tsai no puede presentarse a otro mandato. Estas son sus últimas oportunidades para dejar huella en su partido. Y las cosas no parecen favorables para ella.
Una encuesta reciente muestra que el 44,8 % desaprueba su gestión de la economía. Entre los seis pilares principales de su programa de gobierno, la economía es el segundo más criticado. El número 1 en la lista de desaprobación es el desarrollo de vacunas, con un porcentaje del 48,5 %. Tsai obtuvo los peores resultados en los dos temas más importantes y que más preocupan a los taiwaneses. Ridículamente, su gestión de las llamadas "relaciones internacionales" y de los "asuntos de seguridad" fue la más apreciada, con un 56,7 % y un 51,1 % de aprobación, respectivamente.
El Washington Post ha realizado un estudio interesante sobre la visita de Pelosi, el cual indica que una visita del líder de un país fuerte es probable que empuje al público de los socios pequeños a apoyar más la política de seguridad preferida por la gran potencia. La investigación también sugiere que la visita tranquiliza significativamente al pueblo de Taiwan, aumentando el apoyo público en la isla al gasto militar y de defensa, así como a los objetivos de la política estratégica de Estados Unidos.
Pero es una pesadilla para otros que viven fuera de la política. Chen Chih-Hao, portavoz del Partido de la Promoción de la Unificación de China, dijo que "si ocurriera algo entre la región Taiwan y la parte continental de China o entre China y Estados Unidos, ¿quién cargaría con las consecuencias? Sería Taiwan. Taiwan se convertiría en un campo de batalla y la gente allí moriría".
Existe una sola China, Taiwan forma parte inalienable del territorio chino. Esto es la ley inviolable en las relaciones de ambos lados del Estrecho de Taiwan. Tsai Ing-wen ha intentado desmenuzar esto durante su mandato. Los chinos de ambos lados del Estrecho están pagando un alto precio por ello. Y ese es su legado político.