En Pakistán declararon que, de acuerdo con proyecciones recientes, el daño provocado por las inundaciones estará valuado en más de 10.000 millones de dólares.
También responsabilizaron al cambio climático por la catástrofe e instaron a la comunidad internacional a asumir las responsabilidades pertinentes.
Las inundaciones repentinas destruyeron toda la infraestructura a su paso en un episodio sin precedentes, y dejaron un tendal de al menos 1.000 víctimas fatales. Un total de 33 millones de habitantes resultaron afectados.
La ONU ha lanzado una de las campañas de ayuda humanitaria más grandes de su historia, y ha solicitado 160 millones de dólares. Analistas indicaron que los efectos de la catástrofe podrían ser devastadores para el país que ya se encontraba en medio de una crisis económica.

Las inundaciones repentinas destruyeron toda la infraestructura a su paso en un episodio sin precedentes.