El presidente de Brasil y candidato a la reelección, Jair Bolsonaro, aseguró el martes 13 de septiembre que en caso de vencer en las próximas elecciones trabajará para evitar la ampliación de áreas indígenas, sobre todo en la región amazónica, porque ello amenaza la seguridad de producción de alimentos.
El mandatario, del Partido Liberal, explicó en conferencia de prensa que existe "preocupación con el fin del agronegocio brasileño" en caso de que políticas ambientales sean aplicadas para restringir la expansión de los cultivos y la cría de ganado.
Principal economía latinoamericana, Brasil es el mayor productor mundial de soya y de proteína animal.
El Supremo Tribunal Federal, la máxima corte del país, posee en análisis un proceso judicial que puede reconocer mayores extensiones de tierra a ser preservada de la explotación comercial destinada a los pueblos originarios.
Durante un mitin y una caravana en motocicleta en Sorocaba, estado de Sao Paulo (sureste), Bolsonaro aseguró que si se duplican las tierras protegidas "se terminará la seguridad alimentaria".
"Estamos preocupados con nuestra economía, alimentamos más de 1.000 millones de personas en el mundo", dijo el mandatario.
Según Bolsonaro, "todos deben defender la cuestión ambiental en Brasil" sin que ello signifique reducir el área cultivable.
"Tenemos que defender la cuestión ambiental, tenemos una propuesta de generación de energía eólica en la zona costera marítima que es excepcional y en eso Brasil es interesante para el mundo", aseguró.
Para los comicios del próximo 2 de octubre, el mandatario marcha segundo, a 15 puntos de diferencia del ex mandatario Luiz Inácio Lula da Silva, del Partido de los Trabajadores, de acuerdo con la última encuesta del instituto Inteligencia en Investigación y Consultoría Estratégica (IPEC, por sus siglas en portugués).