El presidente chino Xi Jinping aterrizó el 14 de septiembre por la noche al Aeropuerto Internacional de Samarcanda, Uzbekistán, en el avión presidencial. A su llegada, el presidente uzbeco Mirziyoyev le ofreció una gran ceremonia de bienvenida. Casi un centenar de banderas nacionales de China y Uzbekistán ondearon al viento, el paseo por la gran alfombra fue acompañado por un desfile solemne de los soldados de honor y los cantos y bailes de jóvenes uzbecos vestidos con traje típico.