La municipalidad de Shanghai, una de las ciudades más grandes del mundo, es hogar de abundante cultura, riqueza, entretenimiento, y mucho más, pero también permanece fiel a sus raíces.
Esta metrópoli, además, fue testigo del nacimiento del Partido Comunista de China, y ha constituido una parte integral del ascenso económico del país.
El Partido Comunista de China ha establecido los objetivos de los dos centenarios, que son construir una sociedad modestamente acomodada en todos los aspectos para 2021, y hacer de China un país socialista moderno para 2049.
Detrás de la emblemática torre del reloj de Shanghai, este hombre da mantenimiento al mecanismo que da cuerda a las manecillas. Wei Yunsi, casi en la sesentona, ha salido de la ciudad en muy pocas ocasiones en los últimos 28 años.

Esta metrópoli, además, fue testigo del nacimiento del Partido Comunista de China, y ha constituido una parte integral del ascenso económico del país.
"Es un reloj mecánico, por lo que hay que darle cuerda cada tres días", dijo Wei Yunsi.
En estas casi tres décadas en el cargo, él ha sido testigo de una de las construcciones de paisajes urbanos más audaces en el mundo.
"Cuando comencé a trabajar aquí, podía ver más allá de la ribera oriental del río. Pero lo que ocurrió después verdaderamente me sorprendió. A veces no podía creer que todos esos edificios literalmente crecieran frente a mí".
Y la historia en la ribera occidental no fue muy distinta. La torre del reloj fue construida en la década de 1920 por Reino Unido, en la época en que una parte de la ciudad se convirtió en concesión extranjera. Frente a estos edificios de estilo occidental pasaron colonialistas, el ejército imperialista japonés, un gobierno capitalista y muchos más. Sin embargo, un evento que fue discreto y reservado, trascendió la prueba del tiempo.
Muy cerca de aquel edificio donde el Partido Comunista de China celebró su primera reunión, en la actualidad figuran algunos de los más elegantes bares y restaurantes de Shanghai. Todo ello supone una prueba de los cambios radicales y las aspiraciones del pueblo chino hacia una mejor vida. A pesar de su enorme tamaño, Shanghai sólo representa un pequeño porcentaje del país.
Más:
La industria de los crustáceos genera fortuna en Panjin, China
La mejora drástica de la calidad de vida de residentes de la aldea china de Dapuzi