La provincia de Qinghai, en el noroeste de China, ha mejorado su capacidad de generación de nuevas energías después de instalar 800.000 kilovatios en la prefectura autónoma tibetana de Hainan.

Según han informado las autoridades provinciales de la Corporación Estatal de la Red Eléctrica de China, se espera generar anualmente 1.620 millones de kilovatios-hora (kWh) adicionales de nuevas energías, equivalente a la de 733.000 toneladas de carbón y lograr una reducción de 1,32 millones de toneladas de emisiones de dióxido de carbono.

La capacidad mejorada se debe a un megaprograma en curso de un gigavatio, correspondiente a una de las dos principales bases industriales de nueva energía en Qinghai.

Situada en la meseta Qinghai-Tíbet, en Qinghai se encuentran las cabeceras de los ríos Yangtse, Amarillo y Lancang. La provincia es conocida por su riqueza en recursos hídricos, solares y eólicos.

La región del noroeste de China, donde se sitúa Qinghai, ha duplicado la explotación de energía verde en el marco del masivo impulso verde realizado por el país. El Gobierno ha reiterado que se esforzará por alcanzar su punto máximo de emisiones de dióxido de carbono antes de 2030 y conseguir la neutralidad de carbono antes de 2060.