La 59ª Conferencia de Seguridad de Múnich (CSM) fue inaugurada el día 17 con especial atención a dar voz a los países del sur global, en particular a su resentimiento hacia el orden mundial existente encabezado por Occidente.

Christoph Heusgen, presidente de la CSM, dijo en la ceremonia inaugural que la conferencia de este año "pondrá el foco de atención en el sur global" y "escuchará sus preocupaciones". Durante la ceremonia inaugural, el canciller alemán, Olaf Scholz, también pidió "nuevas formas de solidaridad y participación internacionales" en el "mundo multipolar del siglo XXI". La desilusión del sur global con el orden mundial existente y sus llamados para reformarlo también fueron motivo de atención en un informe publicado el lunes por la CSM, el cual pide plantear un orden mundial que "cumpla mejor sus promesas" y "verdaderamente beneficie a todos por igual". 

Cerca de 150 importantes funcionarios, incluyendo a más de 40 jefes de Estado y de Gobierno y líderes de organizaciones internacionales están asistiendo a la CSM de tres días para discutir los retos y las preocupaciones urgentes relacionados con la seguridad global, incluyendo el conflicto Rusia-Ucrania.