Lo que para muchos era un sueño, ahora está cerca de cumplirse. En medio de los áridos parajes egipcios, una compañía china está construyendo una moderna ciudad ecológica que servirá de inspiración para las futuras generaciones. 

El desierto cubre más del 90 % de la superficie de Egipto y para hacer frente a una población en constante crecimiento, la nación árabe decidió construir nuevas ciudades en el agreste páramo.

Tardan cuatro horas en llegar desde El Cairo hasta la nueva ciudad de El Alamein. En el corazón de la nueva ciudad, se están construyendo cinco altos edificios de apartamentos. Incluso desde lejos, se pueden apreciar las torres en medio del desierto.

Una de ellas, el proyecto Alamein Downtown Towers, es un rascacielo que superará los 300 metros de altura y se convertirá en el segundo más alto de África. Todo esto forma parte del plan egipcio de construcción de ciudades modernas y ecológicas. 

No solamente se trata del diseño, también hay iniciativas de carácter ecológico. El diseñador en jefe, Fan Xinfeng, mostró un material que es común en China pero nuevo en Egipto. Se llama lana de roca.

El material es resistente al fuego y a la humedad. Además, es un aislante del calor, ayudando a mantener las viviendas más frescas. Es una forma de ahorrar energía. El interés de la compañía en iniciativas respetuosas con el medio ambiente, también está influyendo en los trabajadores locales al otorgar una mayor importancia en la sostenibilidad de las nuevas ciudades.

Cuando esté finalizada, la nueva ciudad de El Alamein será el hogar de tres millones de personas y servirá como un destino veraniego más ameno que El Cairo.