El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, afirmó que en el fútbol no hay lugar para la violencia, tras los desagradables enfrentamientos que se produjeron antes del partido de Eliminatorias Sudamericanas para el Mundial 2026 de Brasil contra Argentina.

El martes, durante la entonación de los himnos nacionales, en una tribuna situada detrás de una de las porterías del estadio Maracaná de Río de Janeiro, se produjo una escaramuza entre aficionados rivales, y la policía brasileña se enfrentó a los seguidores argentinos.
"No hay lugar en el fútbol para este tipo de violencia, dentro o fuera de la cancha", dijo Infantino en Instagram.
"Jugadores, aficionados, equipos y dirigentes merecen un entorno seguro", añadió Infantino.