En un artículo de opinión publicado el 17 de enero, se analizan las cinco dimensiones en las cuales se observa el desarrollo de la economía china.

Expresaba recientemente el académico británico Martin Jacques que "El hecho de que la economía china haya mantenido un crecimiento en torno al 5% y siga siendo el motor más importante de la economía mundial es, sin duda, muy positivo". Los datos oficiales de la economía nacional china para 2023, publicados el día 17 de enero, confirman las expectativas de la comunidad internacional. Una serie de datos muestran que la economía china se consolida y refuerza su tendencia al alza.

Al observar el crecimiento económico de China, es importante comparar no sólo verticalmente, sino también horizontalmente. En el último año, la economía mundial ha estado de capa caída, el panorama internacional ha evolucionado de forma compleja y los conflictos geopolíticos se han sucedido con frecuencia. En términos comparables, el crecimiento económico de China equivale a la producción económica total de un país de tamaño medio en un año, algo poco frecuente en el mundo.

En cuanto al consumo, en un momento en que la demanda mundial es insuficiente, el mercado es el recurso más escaso. Como gran mercado más prometedor del mundo, la liberación acelerada del dinamismo del consumo de China es una ayuda para el fomento de la recuperación económica mundial.

Con respecto al rendimiento de las importaciones y las exportaciones, estas “ventajas de China” no solo estimulan el comercio internacional, sino que también optimizan la distribución global de recursos y mantienen la estabilidad de la cadena industrial y de suministro.

Y lo que es más importante, China no es solo la “fábrica del mundo”, sino también un centro mundial de innovación. A finales de 2023, China ha sido el primer país del mundo en contar con más de 4 millones de patentes de invención nacionales válidas. “Creado en China” está acelerando el progreso tecnológico global y la modernización industrial, inyectando un nuevo impulso a la economía mundial.

Un gran número de empresas extranjeras han votado con sus acciones y han elegido China. Elegir el mercado chino no es un riesgo, sino una oportunidad.

En la reunión anual 2024 del Foro Económico Mundial aboga por “reconstruir la confianza” ante el riesgo de fragmentación mundial. Como segunda economía mundial, China puede contribuir a reconstruir la confianza entre las naciones, así afirmó Borge Brende, presidente del FEM. ¿De dónde procede esta “confianza” en China? Proviene de la estabilidad y continuidad a largo plazo de las políticas chinas, de la continua apertura de China al mundo exterior y de la promoción integral de la modernización al estilo chino, que permite al mundo compartir nuevas oportunidades.