La llama de los XIV Juegos Nacionales de Invierno de China en la región autónoma de Mongolia Interior se ha apagado.

Una vez decididas todas las medallas, la ceremonia de clausura se celebró el martes por la noche en un teatro de Hulunbuir, en Mongolia Interior, lleno hasta la bandera, donde aún perdura la pasión de unos Juegos de Invierno que contaron con más de 3.000 atletas compitiendo en 176 pruebas.
Un total de 35 delegaciones de todo el país han participado en los Juegos, y 30 de ellas, incluidas provincias meridionales como Guangdong y Jiangsu, se colgaron medallas. Ambas cifras han experimentado un aumento significativo en comparación con la última edición.
Los próximos Juegos se celebrarán en la provincia nororiental china de Liaoning en 2028. Y su capital, Shenyang, se convertirá en la primera ciudad china en albergar tanto los Juegos Nacionales Verano como los de Invierno. Para muchos atletas de élite, entre ellos los campeones olímpicos Su Yiming y Gao Tingyu, que volvieron a colgarse el oro en los Juegos, ha servido de etapa preparatoria crucial antes de avanzar hacia los Juegos Olímpicos de Invierno de Milán-Cortina 2026.