Los precios al consumidor de China han crecido por quinto mes consecutivo. La creciente confianza por parte de los consumidores sigue impulsando la demanda interna, mientras que la deflación de los precios de fábrica sigue estrechándose. 

Los datos oficiales publicados el 10 de julio mostraron que el índice de precios al consumidor, principal indicador de la inflación, subió un 0,2 % interanual en junio, ligeramente por debajo del aumento del 0,3 % registrado en mayo. El IPC subyacente, que descuenta los precios de los alimentos y la energía, subió un 0,6 %. 

Mientras tanto, el índice de precios a la producción bajó un 0,8 %, lo que supone un descenso anual mucho menor en comparación con los últimos meses, gracias a la recuperación de los sectores de la minería y el tratamiento de alimentos.