El año 2024 marca el 30º aniversario del apoyo nacional a la región autónoma de Xizang. En los últimos años, bajo la atención del Comité Central del PCCh y del Consejo de Estado, Xizang ha incrementado sus esfuerzos para transmitir y proteger sus patrimonios culturales inmateriales, una labor que ha logrado resultados notables.

Los patrimonios culturales inmateriales son como perlas brillantes esparcidas en 1,2 millones de kilómetros cuadrados de tierra en Xizang, y conforman una parte importante de la cultura tradicional de la nación china.

Conozcamos hoy el papel tibetano. Comenzó a fabricarse a mediados del siglo VII y es un producto único de Xizang que llegó a esta región gracias a la princesa Wencheng de la dinastía Tang. Debido a la escasez de materias primas como el bambú y el arroz utilizadas en la fabricación de papel en la llanura central de China, los artesanos tibetanos y han debieron realizar grandes innovaciones para inventar el singular papel tibetano. Durante los últimos mil años, la historia de Xizang ha sido registrada silenciosamente en este medio, y ha sido testigo de la evolución de la civilización tibetana.

El papel tibetano se fabrica a partir del procesamiento de fibras de corteza y fibras de la raíz de una hierba venenosa. El papel tibetano no teme a los insectos, no se pudre, no cambia de color, no es fácil de rasgar, es resistente al plegado y al desgaste. Gracias a su calidad y resistencia, ha sido el medio elegido para numerosos textos religiosos, documentos oficiales e impresiones. Como toda su elaboración es artesanal, se produce en pequeñas cantidades.
