El secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, afirma que el calor extremo del verano en varias regiones este año ha sido preocupante. El día 25 advirtió de que el cambio climático avanza más rápido que todas las medidas que se están poniendo en marcha para combatirlo.

"Afrontemos los hechos: las temperaturas extremas ya no son un fenómeno de un día, una semana o un mes. Si hay algo que une a nuestro mundo dividido es que todos sentimos cada vez más el calor. La Tierra es cada vez más caliente y peligrosa para todos, en todas partes. Miles de millones de personas se enfrentan a una epidemia de calor extremo: sufren las altas temperaturas bajo olas de calor cada vez más mortales, con temperaturas que superan los 50 grados centígrados en todo el mundo, es decir, 122 grados Fahrenheit, y a medio camino de la ebullición", dijo António Guterres.