El pronóstico para la temporada seca de este año en la región de Amazonas es desalentador. Los científicos advierten que probablemente será aún más grave que la del año pasado y estará marcada por una intensa sequía.

La región amazónica de Brasil experimentó una sequía histórica en 2023. La dinámica natural de la región incluye una temporada de lluvias, cuando los ríos crecen, y un período seco, cuando los niveles del agua disminuyen. Las condiciones no solían alcanzar esta magnitud. Las poblaciones locales resultaron gravemente afectadas, y no solo los seres humanos. Al menos 150 delfines de agua dulce, conocidos como botos del Amazonas, murieron a medida que el agua se volvía más escasa y cálida. Las imágenes satelitales muestran el nivel del agua en septiembre de 2022, durante un período seco promedio, y luego la situación en septiembre de 2023, durante la histórica sequía severa. Los indicios señalan una sequía aún más grave este año. El director ejecutivo del Instituto de Investigación Ambiental de la Amazonía del gobierno federal afirma que esto es tanto una consecuencia como una causa del cambio climático.

Andre Guimaraes, director ejecutivo de IPAM, afirma que las mediciones tomadas en los ríos de la región ya indican niveles más bajos que los registrados en esta misma época el año pasado, lo que evidencia dos años consecutivos de sequía severa.

Aunque los investigadores no pueden predecir con exactitud la gravedad de la sequía en el Amazonas este año, están convencidos de que será inevitable.