El centro de estudios Bruegel, con sede en Bruselas, describió como un error la imposición, por parte de la Unión Europea, de nuevos aranceles a los vehículos eléctricos fabricados en China. Bruegel aseguró que la medida perjudicará a los ciudadanos y a la industria automotriz europea. 

En un informe, el centro de estudios señaló que los nuevos aranceles blindarán a los fabricantes europeos contra la competencia y advirtió de que desalentará la cooperación con socios chinos y fragmentará el comercio internacional. Bruegel considera que todo esto acarreará fuertes costes para el bloque. En el informe, también se pone de relieve que este tipo de disputas dañan las relaciones entre China y los Veintisiete y, por ello, el centro insta a reconsiderar la medida. China y la Unión Europea mantendrán abiertas las discusiones sobre la investigación antisubsidios contra los vehículos eléctricos fabricados en China.