Investigadores chinos han desarrollado ladrillos a partir de un material que tiene una composición similar al suelo lunar, con la esperanza de que puedan usarse para construir una base lunar en el futuro.

El equipo también desarrolló otra opción de construcción utilizando tecnología de manufactura aditiva. Los investigadores inventaron un robot de impresión 3D para imprimir casas utilizando suelo lunar.
Zhou Cheng de la HUST dijo que el equipo utilizó diferentes composiciones de suelo lunar simulado y tres distintos procesos de sinterización, lo que puede brindar datos científicos más precisos para la selección de materiales y la optimización del proceso para la construcción de la futura base lunar.
La composición del suelo lunar varía en diferentes sitios en la Luna, comentó Zhou, e indicó que existe una composición que simula el suelo lunar en el sitio de alunizaje de la Chang'e-5, que es basalto principalmente. Algunas otras composiciones simulan el suelo hallado en otros sitios, suelo compuesto sobre todo por anortosita.
Explicó que los ladrillos necesitan ser sometidos a pruebas de desempeño para determinar si su potencia mecánica se degradará en el entorno lunar y si pueden soportar la alta frecuencia de sismos lunares.
La Luna tiene un entorno de vacío con significativa radiación cósmica y las temperaturas superan los 180 grados Celsius durante el día lunar, pero descienden a menos 190 grados Celsius por la noche. El equipo tiene que determinar qué tan bien pueden aislar los ladrillos y si pueden soportar la radiación, afirmó Zhou.
China dio a conocer el martes un programa nacional de desarrollo a mediano y largo plazo para la ciencia espacial, en el que esboza una hoja de ruta para el desarrollo de la ciencia espacial hasta 2050. La estación internacional de investigación lunar, ideada por China, se construirá durante la segunda fase del programa, de 2028 a 2035, de acuerdo con dicho plan.