El Consejo de Estado de China ha impulsado una serie de medidas para promover el desarrollo de los deportes de invierno, estableciendo un objetivo a cinco años con la intención de que se convierta en una de las principales fuerzas impulsoras del crecimiento económico del país.

Las autoridades pronostican una gran demanda en los destinos turísticos de invierno y los centros de esquí. La ciudad china de Harbin recibió el invierno pasado más de 87 millones de visitantes, generando ingresos por turismo que alcanzaron los 17.000 millones de dólares.