El Banco Popular de China utilizará una variedad de instrumentos de política monetaria y ajustará la intensidad y el ritmo de las políticas como lo considere apropiado, con base en las condiciones económicas y financieras nacionales e internacionales, así como en las operaciones de los mercados financieros, señaló un informe publicado el 13 de febrero por la entidad. 

Su objetivo es mantener una liquidez amplia y alinear el financiamiento social con los objetivos de crecimiento económico. Desde 2013, el Banco Popular de China ha reducido el coeficiente de reservas 29 veces, disminuyéndolo del 20,1 % al 6,6 %. 

En 2024, los préstamos pendientes de reembolso, incluidos los préstamos del mecanismo de crédito a medio plazo, representaron el 28,8 % de los activos totales de este banco. Igualmente en 2024, realizó compras netas de bonos por un billón de yuanes, manteniendo una liquidez adecuada. El banco emisor planea adoptar una política monetaria moderadamente laxa para impulsar la innovación tecnológica y el consumo.