El Gobierno de Chile detalló que el apagón eléctrico que afectó al país el 25 de febrero dejó sin luz al 98 % de la población durante unas ocho horas. Tres personas perdieron la vida durante la emergencia.

Unos 300.000 alumnos chilenos vieron suspendidas sus clases. Tiendas y oficinas cerraron. Miles de personas tuvieron que regresar a casa andando, bajo un calor intenso. Los semáforos fallaron y provocaron numerosos atascos y las autoridades evacuaron a los pasajeros del metro. El presidente chileno, Gabriel Boric, afirmó que una falla de la empresa ISA InterChile provocó el corte de energía masivo a lo largo del país. A su vez, y según el ministro de Energía chileno, Diego Pardow, diferentes compañías privadas no cumplieron con los protocolos y los estándares. La mañana del día siguiente, hora local, la mayoría de hogares y negocios volvían a tener electricidad y el Gobierno levantó el toque de queda.