El sector biofarmacéutico innovador de China ha entrado en una etapa clave de desarrollo de alta calidad. Los datos recogidos hasta finales de marzo de 2025 muestran que cada vez son más las empresas biotecnológicas que lograron beneficios anual, con un fuerte aumento en 2024 respecto al año anterior. Tras más de diez años de inversión intensiva, muchas compañías han pasado de “quemar dinero” a generar ingresos propios, gracias al lanzamiento de productos innovadores en áreas como oncología, enfermedades raras y crónicas. Este cambio refleja una transformación estructural: de depender de fuertes inversiones iniciales a generar ingresos sostenibles gracias a productos propios.

Las empresas que han alcanzado beneficios se han beneficiado de reformas clave en el sistema de aprobación de medicamentos y en los mecanismos de financiación e inversión del país. Los datos revelan que algunas de estas empresas experimentaron incrementos anuales de ingresos superiores al 70 % y aumentos de beneficios netos de más del 120 %, impulsadas principalmente por medicamentos estrella que concentran más del 95 % de sus ventas totales. En algunos casos, los ingresos anuales superaron los 35.000 millones de yuanes, con productos que ya lideran el mercado nacional en su categoría.
Además del impulso interno, las empresas han fortalecido su proyección internacional mediante acuerdos de cooperación con gigantes globales como AstraZeneca y Pfizer. El reconocimiento internacional a la capacidad innovadora de China en I+D biotecnológica continúa en aumento.
Con un crecimiento en bolsa superior al 20 % en lo que va de 2025 y nuevas políticas que promueven vías de pago para medicamentos de alto valor, la industria se prepara para una etapa de crecimiento sostenido y con mayor competitividad global.