A orillas de la costa de Sanya, las olas son testigos del impulso de la recuperación económica. Durante la Fiesta de la Primavera, el número de visitantes en los principales destinos turísticos ha crecido significativamente. Los turistas se congregan para disfrutar del paisaje costero, mientras que los mercados locales experimentan un auge: el mercado de abasto registra mayores ventas y el mercado nocturno rebosa de vida, atrayendo tanto a residentes como a viajeros. Con una actividad comercial ininterrumpida las 24 horas del día, Sanya se convierte en un reflejo palpable de la recuperación económica de China.