La emblemática exposición de consumo de China se está celebrando estos días en la ciudad de Haikou, provincia de Hainan, con marcas de lujo mundiales y tecnología de vanguardia. En medio de las tensiones comerciales mundiales, el evento subraya el compromiso de China con la apertura de alto nivel mientras navega por los desafíos arancelarios.

En medio de la agitación arancelaria estadounidense, la exposición convierte a Hainan en una puerta de entrada para el comercio mundial, aprovechando sus políticas portuarias de libre comercio, con cero aranceles a las importaciones y aduanas simplificadas, para atraer la inversión extranjera.

La Expo también ofrece una plataforma para que las empresas chinas se internacionalicen. La exposición estrena también una IA, aviación de baja altitud y zonas de tecnología verde. Además, presenta robots humanoides, jets eléctricos de despegue vertical e innovaciones ecológicas.

La estrategia china de "doble circulación", que vincula la demanda nacional con la oferta mundial, se puede ver en esta exposición, en la que participan 65 empresas de Fortune 500, un 20 % más que en 2024.