El Libro Beige de la Reserva Federal estadounidense sobre la situación económica, publicado el 23 de abril revela un aumento de la incertidumbre económica y un deterioro significativo de las perspectivas en varias regiones del país. La palabra "arancel" aparece 107 veces en el libro de 56 páginas, más del doble que en la edición anterior. El impacto de la incertidumbre creada por los aranceles puede considerarse significativo.

De hecho, los aranceles no están devolviendo el capital esperado, sino que están creando el riesgo de estancamiento y una expectativa de desaceleración económica. Ya se trate de abastecerse de productos cotidianos o de comprar artículos más baratos en plataformas chinas de comercio electrónico, todo refleja la ansiedad y el pánico de los consumidores estadounidenses. Las empresas estadounidenses también están pasando apuros, con un aumento de los costes y una reducción de los beneficios. Es más, si otros países deciden tomar represalias contra los aranceles adicionales de EE. UU., el impacto en la economía estadounidense podría ser aún más grave.
En los últimos días, el Gobierno estadounidense ha señalado que el conflicto arancelario con China podría remitir pronto, o que ambas partes están en conversaciones para llegar a un acuerdo. Sin embargo, China ha dejado claro que hasta la fecha China y EE. UU. no han sostenido cualquier negociación económica o comercial. Si Estados Unidos quiere realmente resolver el asunto, tendrá que escuchar las voces racionales de la comunidad internacional y abolir por completo las medidas arancelarias unilaterales contra China.