Tras 100 días en el cargo, Trump y su programa “América primero” se han topado con graves problemas. En febrero y abril de este año, CGTN realizó dos encuestas de opinión globales, dirigidas a 15.947 encuestados de 38 países. La encuesta reveló que la satisfacción de los encuestados estadounidenses con la actuación de Trump ha disminuido rápidamente. El enfoque de política exterior “América primero” ha dejado a los encuestados tanto de los aliados tradicionales de Estados Unidos como de los países del Sur Global pesimistas sobre el futuro de sus relaciones con Estados Unidos. La nueva Administración estadounidense se enfrenta a una grave crisis de confianza global.

Los datos muestran que el 48,9 % de los encuestados estadounidenses expresaron su descontento con la actuación de la nueva administración. Entre ellos, el 53,1 % criticó la política de “aranceles recíprocos” por haber afectado gravemente al mercado de valores estadounidense. El 60,4 % opinó que las políticas económicas nacionales no sólo no controlaron la inflación, sino que provocaron una subida de precios; y el 54 % cuestionó duramente su política de tipos de interés.
En cuanto a la opinión de los encuestados estadounidenses sobre la economía y el desarrollo nacional a corto plazo, la proporción de encuestados pesimistas es mayor que la de optimistas: El 43,1 % de los encuestados cree que la economía estadounidense podría empeorar en los próximos tres meses, mientras que el 47,5 % piensa que Estados Unidos va en la “dirección equivocada”. El pesimismo es aún más pronunciado entre los encuestados demócratas, ya que el 62,3 % expresa una gran preocupación por el futuro de EE. UU.
“América primero” ha hecho pagar el precio al mundo, dañando gravemente la confianza de sus aliados tradicionales. Los datos muestran que los encuestados de varios países -entre ellos Canadá, Reino Unido, Francia, Alemania, Japón y Australia- expresaron su profunda preocupación por sus relaciones con Estados Unidos.
Entre ellos, los encuestados australianos mostraron el cambio más significativo, con un 65,5 % de pesimistas sobre el futuro de las relaciones entre Estados Unidos y Australia, lo que supone un fuerte aumento de 24,5 puntos porcentuales en comparación con la encuesta anterior. Del mismo modo, el 55 % de los encuestados italianos se mostraron pesimistas sobre el futuro de las relaciones entre Estados Unidos e Italia, lo que supone un aumento de 21,5 puntos porcentuales respecto a la encuesta anterior. En Francia, Alemania, Canadá, Japón y Corea del Sur, más del 70 % de los encuestados también manifestaron una visión pesimista sobre la evolución de sus relaciones con Estados Unidos.
Además, los encuestados creen, en general, que la política de “América primero” ha llevado a Estados Unidos a desatender aún más a sus aliados tradicionales. El 87 % de los encuestados surcoreanos coinciden con esta opinión. En el Reino Unido, Alemania, Canadá, Australia e Italia, más del 70 % de los encuestados también se mostraron de acuerdo. La proporción de encuestados que sostienen esta opinión en Italia y Alemania mostró un aumento significativo en comparación con la encuesta anterior, aumentando en 17 y 15 puntos porcentuales respectivamente.
Entre los 23 países del Sur Global encuestados, los encuestados de 19 países -que representan el 82,6 % de los países encuestados- expresaron su pesimismo sobre el futuro de sus relaciones con Estados Unidos. En comparación con la encuesta anterior, los encuestados de Sudáfrica, Egipto, Perú, Indonesia y Malasia mostraron los mayores descensos de confianza, con caídas de más de 20 puntos porcentuales cada uno. Los encuestados de Arabia Saudí, Brasil, Argentina, Turquía, Emiratos Árabes Unidos, Chile, Ghana, México y Tailandia también registraron descensos de más de 10 puntos porcentuales.
Las encuestas fueron realizadas por CGTN en colaboración con la Universidad Renmin de China a través del Instituto de Comunicación Internacional en la Nueva Era, y abarcaron a 15.947 encuestados de 38 países. Entre los encuestados había personas de países desarrollados como Estados Unidos, Reino Unido, Francia y Japón, así como de países en vías de desarrollo como México, Sudáfrica y Malasia.