En Estados Unidos, la actividad económica en el sector manufacturero continuó contrayéndose en abril, una desaceleración que desmiente la promesa del presidente Donald Trump de convertir a Estados Unidos en una superpotencia manufacturera durante su segundo mandato.

El Instituto de Gestión de Suministros, o ISM por sus siglas en inglés, publicó su último informe el 1 de mayo, revelando que el Índice de Gerentes de Compras de Manufactura ISM disminuyó a unos 48,7 puntos el mes pasado.

Es el segundo mes consecutivo de contracción.

Timothy Fiore, presidente del Comité de Encuestas a Empresas Manufactureras del ISM, afirma que los resultados muestran que la demanda y la producción del país se han debilitado, mientras que los insumos se han fortalecido aún más.

Por otra parte, el Departamento de Comercio de Estados Unidos afirma que el PIB del país se contrajo a una tasa anualizada del 0,3 % en el primer trimestre de 2025, lo que supone un claro descenso respecto al último trimestre del año anterior.