Con una población mayor de 60 años que alcanzaba los 310,31 millones de personas en 2024 y estimando que para el año 2035 se superará la cifra de 400 millones de personas mayores (más del 30 % de la población total), China ha desarrollado un modelo de atención geriátrica sin precedentes. Los datos del Ministerio de Asuntos Civiles revelan que durante el XIV Plan Quinquenal (2021-2025), se renovaron 303.600 camas de enfermería y se brindó atención domiciliaria a 535.800 adultos mayores, cifras que reflejan la magnitud de esta transformación social.
El sistema nacional, implementado en mayo de 2023, contempla 16 servicios básicos agrupados en asistencia material, cuidados diarios y bienestar emocional. Solo en la provincia de Jiangsu, 236,000 ancianos en situación vulnerable se incorporaron al programa de visitas regulares durante el primer semestre de 2024, lo que demuestra el alcance de estas intervenciones.
La inversión en infraestructura ha alcanzado hitos significativos, como los 100 millones de yuanes que la provincia de Jilin destinó en 2023 a la construcción de 102 centros comunitarios y 100 comedores especializados. Paralelamente, la nueva ley para la construcción de entornos vitales sin barreras, vigente desde septiembre de 2023, ha permitido avances concretos como la instalación de 395 ascensores en la comunidad Longcheng de Shenzhen, beneficiando a más de 30.000 residentes.
Siguiendo con esta tendencia, en enero de 2025, el Gobierno chino publicó una serie de directrices enfocadas a profundizar en las reformas de los servicios de atención a las personas de la tercera edad. El documento propone reforzar los servicios básicos de atención a este sector de la población, prestando especial atención a las personas con discapacidad, así como mejorar las políticas y medidas para garantizar unos servicios de atención accesibles y tangibles.
Ante el ritmo acelerado del envejecimiento demográfico en China, las autoridades trabajan en mecanismos para ajustar estos servicios a las necesidades futuras y garantizar que la cobertura se mantenga en consonancia con el desarrollo económico y social del país.