El Gobierno chino apuesta por una estrategia para modernizar las ciudades del país. Durante el 2025, se apoyará a proyectos de renovación urbana, prestando especial atención a la mejora de la calidad de vida de los residentes y al fortalecimiento de las infraestructuras clave.

El Ministerio de Finanzas proporciona apoyo financiero para la renovación urbana en hasta 20 urbes prioritarias, entre las que destacan megaciudades y aquellas ubicadas en cuencas fluviales estratégicas. La iniciativa cuenta con un sistema de financiamiento diferenciado por regiones: las ciudades del este recibirán hasta 800 millones de yuanes, las del centro hasta 1.000 millones y las del oeste y los lugares que dependen directamente de la administración central obtendrán un máximo de 1.200 millones. Estos recursos, asignados progresivamente según el avance de los proyectos, deberán destinarse principalmente a la modernización de tuberías subterráneas y otras infraestructuras críticas, con objetivos concretos a tres años.
Entre los objetivos clave figura la mejora sustancial del tratamiento de aguas residuales , abordando así algunas de las principales preocupaciones ciudadanas. Las autoridades buscan crear un modelo de renovación sostenible que combine el desarrollo urbano y el bienestar social.
Esta estrategia refuerza el compromiso de China con la urbanización inteligente, donde la modernización de las ciudades se alinea con estándares ambientales y de eficiencia.