Con motivo del Día de la Madre, la heredera representativa del patrimonio cultural inmaterial de Rizhao en la provincia de Shandong, Li Ping, ha horneado flores de pan únicas en su tipo, inspiradas en el clavel, la peonía y la rosa. Con la técnica tradicional como base, transformó la masa en delicados pétalos superpuestos, logrando que cada flor cobre vida: el clavel, suave y delicado; la peonía, majestuosa y elegante; y la rosa, fresca y vibrante.

Estas flores de pan, un arte popular transmitido de generación en generación, se han convertido en un símbolo de amor familiar. Muchos han encargado estas piezas como un regalo especial para sorprender y bendecir a sus madres.