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Zoológico de Viena da la bienvenida a una pareja de pandas gigantes
Actualizado 2025-05-17 04:59 GMT
CGTN Español

01:51

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El Zoológico de Viena ha dado la bienvenida a dos nuevos pandas gigantes provenientes de China. Durante la ceremonia de recepción, el presidente austríaco, Alexander Van der Bellen, destacó a estos tiernos animales como un símbolo de la estrecha amistad que existe entre ambos pueblos.

Mientras Lan Yun y He Feng degustaban bambú cultivado en Austria, los alrededores de su nuevo hogar se llevaba a cabo un evento diplomático, en el que delegaciones de China y Austria les dieron la bienvenida oficial con la tradicional danza del león.

"Es un momento muy especial hoy poder dar la bienvenida a los osos panda en Austria, aquí en el Tiergarten Schönbrunn", dijo Christian Stocker, Canciller de Austria.

"Iniciativas de cooperación como esta generan confianza y acercan a las naciones. No debemos subestimar el impacto de estos pequeños eventos, tienen un gran significado, a pesar de las diferencias que puedan existir. Los pandas gigantes son un símbolo de la asociación entre China y Austria", dijo Alexander Van der Bellen, Presidente de Austria.

Hoy en día, los pandas gigantes como Lan Yun y He Feng ya no se consideran una especie en peligro de extinción. Gracias a las estrictas medidas de conservación implementadas en China, su población casi se ha duplicado desde 1980.

"Como embajadores, se convertirán en símbolos de la amistad entre ambos países y sus pueblos. El panda gigante es un tesoro nacional de China, una joya de la biodiversidad del planeta y un preciado emblema de la civilización ecológica", indicó Li Hongzhong, vicepresidente del Comité Permanente de la APN.

El Tiergarten Schönbrunn de Viena, reconocido como el zoológico más antiguo del mundo, ha estado trabajando con la Asociación para la Conservación de la Vida Silvestre de China desde hace más de dos décadas. El año pasado, ambos países renovaron este compromiso por diez años más, periodo en que Lan Yun y He Feng, nacidos en el 2020, deben permanecer en la capital austriaca. Ambas partes esperan que la pareja se adapte a su nuevo hogar, y quizás lo conviertan en una residencia familiar en el futuro.